Escribe: Erick Braga.
Una vez más he tenido la oportunidad de ver como transcurren las horas del día y la noche en las comunidades de la Amazonia – Madre de Dios. Llegue a Puerto Maldonado a mediados de Diciembre del 2007 gracias a una oportunidad laboral que se me presento en el programa interoceánico sur- Proyecto: Consolidación de las concesiones Forestales, pero sobre todo vine en busca de nuevas aventuras y medios necesarios para contribuir a la forja y construcción de un proyecto que considero, será la nueva antorcha que deberá alumbrar el camino de la conquista de una nueva realidad en el Perú: La integración de los Pueblos Amazónicos y Andinos en una nueva Republica de estados Autónomos y Federales. Aventurero que se lanza a la vida en busca de nuevos motivos para seguir viviendo, guiado por una fuerza vital que habita el corazón, sin embargo debo decir que construir un proyecto e ideal no es un asunto que depende de la voluntad individual, sobre todo cuando se trata de un proyecto revolucionario que involucra una serie de factores económicos, sociales y políticos; lo cual se pone mucho más difícil y complicado cuando las condiciones económicas personales empiezan a hacer efecto debido a los enfrentamientos con la injusticia y la informalidad del Programa Interoceánico Sur, de cualquier modo he tratado de verter mis opiniones por este y otros medios sobre la necesidad de trabajar en la unidad de todas las fuerzas progresistas, nacionalistas, patrióticas y revolucionarias para juntos construir un nuevo amanecer, lo cual en mi opinión pasa por comprender la importancia de la integración de los pueblos Amazónicos y Andinos en un proyecto de perspectiva revolucionaria.
Y es que el proceso de lucha que hoy se va construyendo en el Perú desde hace ya hace algunos años, es un proceso que nace desde la cordillera de los andes y el grito ecuménico de rebeldía de los pueblos Amazónicos, desde las regiones del Sur, centro, norte y oriente nos llegan noticias alentadoras que demuestran que el proceso de construcción de una nueva realidad en el Perú se va edificando por abajo y fluye como las quebradas y los riachuelos ocultos que caen desde las altas montanas hasta llegar al océano en un abrazo con el sol, sol que deberá iluminar el alba de un nuevo despertar, no obstante es preciso señalar que este proceso no será un lecho de rosas, por que aún entre quienes reclaman el cambio existen individuos y asociaciones colectivas cuyo mayor propósito no es el cambio de rumbo de este sistema, sino la administración y la continuidad de un modelo económico que hoy azota al mundo debido a la gran crisis financiera, cuyos platos rotos los paga y los seguirá pagando el pueblo y la clase trabajadora.
En medio de todo este proceso de marchas y contra marchas, encuentros y desencuentros con el presente y el “futuro”, es inevitable reconocer que los nuevos actores sociales del cambio, emergen no de los partidos y los clásicos movimientos sociales de ayer y hoy, nos encontramos pues frente a un nuevo movimiento social que surge desde la periferia hacia el centro, desde los asentamientos humanos, desde las pequeñas y medianas organizaciones sociales y políticas; cuya dinámica y rebeldía se hace sentir en acciones concretas que marcan la pauta y orientan a los campesinos, obreros, estudiantes, pequeños y medianos comerciantes, empresarios, artistas e intelectuales, trabajadores, amas de casa, desempleados, ciudadanos de la urbe y el campo impregnados de una gran motivación social listos para el cambio, eso son los nuevos actores sáciales cuyas razones de lucha van más allá de un sentimiento izquierdizante ó dogmático, se trata de una lucha por la vida, por la humanización del planeta, que hoy se encuentra lacerada y conflagrada moral y físicamente, no solo debido a las grandes guerras que el imperio siembra en las regiones de oriente medio y otras latitudes, la contaminación ambiental y la amenaza de una hecatombe ó un cataclismo atómico mundial, sino que también y lo que es peor, este sistema contamina la pureza del alma y la razón en estupidizaciones de un mundo virtual que lo comercializa todo.
cuando a mi se me pregunta como resolver todo esto en el Perú (¿?) debo decir que la respuesta no la tengo yo, la tienen los pueblos andinos y amazónicos que hoy luchan por su sobre vivencia y la construcción de un mundo nuevo, pues ahí esta la fe y la razón para seguir creyendo que aquella “utopía” de una nueva sociedad hoy esta más vigente que nunca y mucho más aún cuando nos llegan noticias desde el hermano país del Salvador donde el Frente de Liberación Nacional “Farabundo Marti” acaba de obtener una reciente victoria electoral y es entonces cuando tengo la sensación y la certeza de que Latinoamérica se va convirtiendo en el nuevo escenario donde florece y enverdece la integración revolucionaria de los pueblos, pues mucho más allá de todas las acepciones y las interrogantes sobre si este es o no un fenómeno político social de “socialismo alternativo” que va cobrando fuerza, debo manifestar que lo importante es el proceso mismo que hoy vive Latinoamérica, que los sueños de Bolívar, Tupac Amaru, el gran amauta José Carlos Mariategui y el comandante Ernesto Che Guevara va señalando el camino de la victoria, no solo a través de la lucha directa sino también a través de los procesos eleccionarios donde el Pueblo manifiesta su voluntad de apoyar un gobierno de nuevo tipo: Popular, Socialista y democrático.
La lección esta dada, el Perú vive momentos decisivos para acercarse a este importante proceso, es ahora o nunca donde la unidad se convierte en un asunto de vida o muerte y donde se hace vital que el liderazgo y la convicción firme y revolucionaria de nuestro próximo presidente nazca desde las canteras de aquel hombre y ser humano que emerge con el espíritu de valentía y coraje, que no vacila ni titubea ante los siglos de colonialismo, aristocracia y una burguesía política-económica ecléctica, cuyo gobierno hoy le abre las piernas al gran imperio y a todas las trasnacionales del mundo que buscan saquear y explotar nuestros recursos naturales a costa de poner en peligro a la humanidad y la soberanía nacional, se requiere entonces no solo de un pueblo que guiado por su espíritu de lucha señala la senda y la victoria, sino también y es importante decirlo, se necesita que quien se ponga al frente y goce del apoyo popular este preparado para nunca traicionar al pueblo, de cualquier modo basado en todas las experiencias de nuestra historia, se hace mucho más importante aún construir una sociedad conciente y activa, basada en una educación liberadora y de transformación social, para la producción y el aprovechamiento de nuestros recursos naturales.
De aquí que la importancia de la organización es un asunto fundamental, lo cual abra que decirlo una y otra vez, es este el gran pilar sobre el cual deberá erigirse todo el proceso revolucionario, que el Perú aguarda desde hace siglos, he ahí la importancia de que hoy trabajemos en la forja de organizaciones sólidas y claras en su propósito, con objetivos y metas rotundamente definidos.
Puerto Maldonado, 22 de Marzo del 2009.
Una vez más he tenido la oportunidad de ver como transcurren las horas del día y la noche en las comunidades de la Amazonia – Madre de Dios. Llegue a Puerto Maldonado a mediados de Diciembre del 2007 gracias a una oportunidad laboral que se me presento en el programa interoceánico sur- Proyecto: Consolidación de las concesiones Forestales, pero sobre todo vine en busca de nuevas aventuras y medios necesarios para contribuir a la forja y construcción de un proyecto que considero, será la nueva antorcha que deberá alumbrar el camino de la conquista de una nueva realidad en el Perú: La integración de los Pueblos Amazónicos y Andinos en una nueva Republica de estados Autónomos y Federales. Aventurero que se lanza a la vida en busca de nuevos motivos para seguir viviendo, guiado por una fuerza vital que habita el corazón, sin embargo debo decir que construir un proyecto e ideal no es un asunto que depende de la voluntad individual, sobre todo cuando se trata de un proyecto revolucionario que involucra una serie de factores económicos, sociales y políticos; lo cual se pone mucho más difícil y complicado cuando las condiciones económicas personales empiezan a hacer efecto debido a los enfrentamientos con la injusticia y la informalidad del Programa Interoceánico Sur, de cualquier modo he tratado de verter mis opiniones por este y otros medios sobre la necesidad de trabajar en la unidad de todas las fuerzas progresistas, nacionalistas, patrióticas y revolucionarias para juntos construir un nuevo amanecer, lo cual en mi opinión pasa por comprender la importancia de la integración de los pueblos Amazónicos y Andinos en un proyecto de perspectiva revolucionaria.
Y es que el proceso de lucha que hoy se va construyendo en el Perú desde hace ya hace algunos años, es un proceso que nace desde la cordillera de los andes y el grito ecuménico de rebeldía de los pueblos Amazónicos, desde las regiones del Sur, centro, norte y oriente nos llegan noticias alentadoras que demuestran que el proceso de construcción de una nueva realidad en el Perú se va edificando por abajo y fluye como las quebradas y los riachuelos ocultos que caen desde las altas montanas hasta llegar al océano en un abrazo con el sol, sol que deberá iluminar el alba de un nuevo despertar, no obstante es preciso señalar que este proceso no será un lecho de rosas, por que aún entre quienes reclaman el cambio existen individuos y asociaciones colectivas cuyo mayor propósito no es el cambio de rumbo de este sistema, sino la administración y la continuidad de un modelo económico que hoy azota al mundo debido a la gran crisis financiera, cuyos platos rotos los paga y los seguirá pagando el pueblo y la clase trabajadora.
En medio de todo este proceso de marchas y contra marchas, encuentros y desencuentros con el presente y el “futuro”, es inevitable reconocer que los nuevos actores sociales del cambio, emergen no de los partidos y los clásicos movimientos sociales de ayer y hoy, nos encontramos pues frente a un nuevo movimiento social que surge desde la periferia hacia el centro, desde los asentamientos humanos, desde las pequeñas y medianas organizaciones sociales y políticas; cuya dinámica y rebeldía se hace sentir en acciones concretas que marcan la pauta y orientan a los campesinos, obreros, estudiantes, pequeños y medianos comerciantes, empresarios, artistas e intelectuales, trabajadores, amas de casa, desempleados, ciudadanos de la urbe y el campo impregnados de una gran motivación social listos para el cambio, eso son los nuevos actores sáciales cuyas razones de lucha van más allá de un sentimiento izquierdizante ó dogmático, se trata de una lucha por la vida, por la humanización del planeta, que hoy se encuentra lacerada y conflagrada moral y físicamente, no solo debido a las grandes guerras que el imperio siembra en las regiones de oriente medio y otras latitudes, la contaminación ambiental y la amenaza de una hecatombe ó un cataclismo atómico mundial, sino que también y lo que es peor, este sistema contamina la pureza del alma y la razón en estupidizaciones de un mundo virtual que lo comercializa todo.
cuando a mi se me pregunta como resolver todo esto en el Perú (¿?) debo decir que la respuesta no la tengo yo, la tienen los pueblos andinos y amazónicos que hoy luchan por su sobre vivencia y la construcción de un mundo nuevo, pues ahí esta la fe y la razón para seguir creyendo que aquella “utopía” de una nueva sociedad hoy esta más vigente que nunca y mucho más aún cuando nos llegan noticias desde el hermano país del Salvador donde el Frente de Liberación Nacional “Farabundo Marti” acaba de obtener una reciente victoria electoral y es entonces cuando tengo la sensación y la certeza de que Latinoamérica se va convirtiendo en el nuevo escenario donde florece y enverdece la integración revolucionaria de los pueblos, pues mucho más allá de todas las acepciones y las interrogantes sobre si este es o no un fenómeno político social de “socialismo alternativo” que va cobrando fuerza, debo manifestar que lo importante es el proceso mismo que hoy vive Latinoamérica, que los sueños de Bolívar, Tupac Amaru, el gran amauta José Carlos Mariategui y el comandante Ernesto Che Guevara va señalando el camino de la victoria, no solo a través de la lucha directa sino también a través de los procesos eleccionarios donde el Pueblo manifiesta su voluntad de apoyar un gobierno de nuevo tipo: Popular, Socialista y democrático.
La lección esta dada, el Perú vive momentos decisivos para acercarse a este importante proceso, es ahora o nunca donde la unidad se convierte en un asunto de vida o muerte y donde se hace vital que el liderazgo y la convicción firme y revolucionaria de nuestro próximo presidente nazca desde las canteras de aquel hombre y ser humano que emerge con el espíritu de valentía y coraje, que no vacila ni titubea ante los siglos de colonialismo, aristocracia y una burguesía política-económica ecléctica, cuyo gobierno hoy le abre las piernas al gran imperio y a todas las trasnacionales del mundo que buscan saquear y explotar nuestros recursos naturales a costa de poner en peligro a la humanidad y la soberanía nacional, se requiere entonces no solo de un pueblo que guiado por su espíritu de lucha señala la senda y la victoria, sino también y es importante decirlo, se necesita que quien se ponga al frente y goce del apoyo popular este preparado para nunca traicionar al pueblo, de cualquier modo basado en todas las experiencias de nuestra historia, se hace mucho más importante aún construir una sociedad conciente y activa, basada en una educación liberadora y de transformación social, para la producción y el aprovechamiento de nuestros recursos naturales.
De aquí que la importancia de la organización es un asunto fundamental, lo cual abra que decirlo una y otra vez, es este el gran pilar sobre el cual deberá erigirse todo el proceso revolucionario, que el Perú aguarda desde hace siglos, he ahí la importancia de que hoy trabajemos en la forja de organizaciones sólidas y claras en su propósito, con objetivos y metas rotundamente definidos.
Puerto Maldonado, 22 de Marzo del 2009.
